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La puerta se abre fácilmente. Tras ella se encuentra un almacén donde se guardan los aperos de labranza y el sebo para hacer velas, que se utilizan mucho en los monasterios y abadías para iluminar las iglesias y los espacios con escasa iluminación. Por último, en un apartado se encuentra el leñero, donde hay una montaña de leña cortada en pequeños trozos y lista para ser utilizada.

Entre los aperos puedes ver un pico y una pala. Los puedes coger si quieres, pero cuentan como armas a la hora de añadirlos a tu equipo. También puedes atacar con ellos, pero si lo haces debes restar 2 puntos de tu Destreza antes de realizar la tirada de ataque.

Si quieres probar la otra puerta, pasa al 44.
Si quieres abandonar el edificio, consulta el plano y elige una nueva localización.